Pánico escénico. Pánico a salir
al escenario, a dejar que empiece la función sin saber cómo va a acabar (o
incluso sabiéndolo). Pánico a que no se haya escrito el guión perfecto para mí,
o a no saber interpretarlo correctamente. Pánico a quedarme en blanco
cuando toca decir algo importante, a quedarme quieta en vez de salir corriendo
del plató, riéndome a carcajadas. Pánico a creerme demasiado que todos
somos cada personaje, a olvidarme de que no es más que teatro y que fuera, nada
de eso vale una mierda. Pánico a que se me enganche el vestido con
cualquier cosa, se rompa y me quede desnuda ante el público. Actuando, pero sin
poderme esconder.
Y por eso, nunca me he atrevido a
subir a un escenario y dejarme llevar, olvidándome de mi vida y asumiendo otra
totalmente distinta. No me ajusto al guión.
Y sin embargo, en el fondo no dejo de actuar.
1 comentario:
pues a mí me gusta >//<
tal vez porque adoro el teatro con toda el alma, conozco perfectamente cada uno de esos miedos bien clavados dentro, hasta que sales y haces tuyo el escenario, te adueñas del telón y ya no hay qué temer.
(pero no sé si está bien no dejar de actuar nunca. =/)
Publicar un comentario